El portavoz del equipo de Gobierno, Luis Fernández, y el concejal de Economía y Hacienda, Alberto Iglesias, ofrecieron esta mañana una rueda de prensa para hablar sobre la modificación de algunas ordenanzas y que se reflejarán en los presupuestos de 2020 que el equipo de Gobierno tiene previsto presentar a finales del presente mes o primeros de diciembre.
Unos presupuestos que Luis Fernández dijo son “difíciles de encajar”, además de “complicados por los más de doce millones de deuda” existente y que han llevado a un reajuste de las ordenanzas que se reflejarán en los presupuestos para el próximo año, que también incluirán “una serie de mejoras para la calidad del día a día de nuestros vecinos”, explicó Luis Fernández.
Este lunes se llevará a pleno la modificación de las ordenanzas fiscales. “Hemos tenido que tomar una decisión difícil”, argumentó Iglesias, existiendo dos alternativas “mirar hacia otro lado o tomar las riendas de la situación económica tan complicada que tiene este ayuntamiento” y “desgraciadamente, vamos a tener que subir el IBI tres centésimas”, lo que supondrá una recaudación aproximada de unos 140.000 euros; con el convencimiento de Alberto Iglesias de que aun siendo medidas “duras y complicadas” redundarán “en beneficio de nuestro pueblo”.
Según el responsable de Economía y Hacienda, el presupuesto del 2020 “nace muy hipotecado porque hemos tenido que hacer frente a diversas sentencias condenatorias contra este ayuntamiento”, como son unas tasas de vertidos sin abonar a la Confederación Hidrográfica del Júcar en los años 2010, 2014 y 2015, que alcanzan un montante de más 200.000 euros; además del pago por jubilación anticipada a varios policías locales de 180.000 euros. A esto se suma una multa de la JCCM por unas obras realizadas en la cancha municipal de prácticas del campo de golf y una inspección de trabajo abierta por un accidente producido a principios de este año.
“No es una decisión que nos guste, es complicada y esperamos que los vecinos la entiendan; porque la otra opción hubiera sido recortar inversiones en infraestructuras, arreglo de calles, en ayudas a colectivos…”. Seguidamente dijo esperar que el PP vote a favor en el próximo pleno de esta medida, “porque al fin y al cabo esto es consecuencia de su gestión”. Y añadió que el compromiso del equipo de Gobierno es “devolver a los vecinos el esfuerzo que van a realizar”.
Por otra parte, el PSOE aseguró comprometerse para las próximas ordenanzas fiscales reducir o bonificar el IBI de rústica que pagan los ganaderos y que han sufrido un alza muy considerable.
En cuanto a la modificación de ordenanzas fiscales, se van a establecer unos requisitos para acceder a las bonificaciones y reducciones de las tasas de basura y abastecimiento de agua, estipulándose un límite de renta para poder beneficiarse.
En el establecimiento de nuevas ordenanzas se incluye una tasa por derechos de examen, para quienes se presenten a convocatorias que realice el consistorio. En otro orden de cosas, también se le gravará a las entidades financieras por poseer cajeros en la vía pública.
En definitiva, una serie de acciones que responden a un “Gobierno que es responsable con las finanzas municipales”, asegurando que “les vamos a devolver con creces a los rodenses este esfuerzo y van a ver como este pueblo va a mejorar en estos cuatro años”, concluyó Alberto Iglesias.